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LUCAS GARRIDO LECCA : SER O NO SURF

Figura importante del tablismo peruano, Lucas vuelve a aguas internacionales luego de una pausa en la que se enfocó en su empresa ‘Surf Place’ Publicado: 14 de marzo de 2024

Al conversar para este artículo, Lucas se encuentra en el Uruguay Longboard Festival de la WSL (World Surf League). Tablista desde hace dos décadas, permaneció por seis años en la primera división del circuito mundial, hasta que un día puso las olas en pausa.

La de Uruguay es su primera competencia fuera de Perú después de un año y medio. «Sigo afilada]o», afirma. Para este certamen se ha tomado las cosas con cero presión. No solo compite, sino que también realiza la locución (o narración) del evento; transmitir en vivo es algo que le divierte.

Lucas surfea olas en el Uruguay Longboard Festival de la WSL, representando al Perú después de más de 1 año de para.

«Salí del circuito porque consumía bastante mi tiempo y quería meterle todo el enfoque a mi empresa», asegura, refiriéndose a la startup ‘Surf Place Perú’, una generadora de contenido surfero.

Entrevistas, en vivos, pronósticos de mar, dos tiendas, una en Lima y otra en Punta Hermosa: ‘Surf Place’ va sobre la cresta de la ola digital. «La idea de esta empresa salió de mi socio y primo Vasco González. Después se nos unió en la aventura Rodrigo Dañino —apunta —. Yo consumo demasiado surf, pero Vasco consulta podcast, revistas, noticieros. Él mismo se considera un surf-nerd. Somos un buen equipo».

Si bien frenó su carrera para priorizar Surf Place, al final no pudo alejarse del deporte del todo. «Me di cuenta que tengo que seguir vigente por el bien de la empresa», refiere. Desde hace cuatro años, Lucas se mudó por completo a Punta hermosa, donde sus días empiezan corriendo olas y luego se dedica a la chamba, para cerrar el día practicando jiu-jitsu. Así disfruta la vida.

Estudió administración y negocios del deporte, tiene subcampeonatos, fue tercero en el ranking de la élite del longboard en 2019, ha sido coach, juez de eventos. No hay arista del surf donde no se haya zambullido.

«Aún mi sueño es ser campeón del mundo —jura —. Este año veré si voy a los selectivos para el mundial. Si lo consigo, iré con gusto a representar al país. Si no, ya pues, mandaré CV para narrar eventos regionales de la WCL», comenta divertido.

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